El Caballito de mar o Hippocampus erectus es un pez pequeño y de forma peculiar, con un cuerpo alargado y una cabeza que se asemeja a la de un caballo. Son ideales para acuarios marinos y su cuidado requiere de un ambiente tranquilo y libre de depredadores, así como una dieta especial a base de camarones y otros crustáceos. Son peces fascinantes de observar y agregarán un toque único a cualquier acuario.
El caballito de mar (Hippocampus erectus) es una especie de pez de la categoría Hippocampus, con un precio de 76.00 €. Es un animal que requiere una temperatura mínima de 18 grados y una máxima de 24 grados. Además, sus niveles de PH deben oscilar entre 7 y 8, con un GH máximo de 35 y mínimo de 25. Respecto a la dureza del agua, necesita un KH entre 8 y 12 y requiere al menos 75 litros por pez en el acuario.
Los caballitos de mar, como se conocen comúnmente, esta variedad se cría en cautividad, dando una fiabilidad de aclimatación y además de esta manera evitamos los estragos de la pesca ilegal. Se pueden adquirir por parejas y conviene situarlos en acuarios con peces de sus mismas características para evitar que tengan que competir por la alimentación. Adquieren coloración dependiendo del entorno, edad, sexo.
El caballito de mar requiere un acuario específico para ellos, con un volumen mínimo de 150 litros. Además, su nivel de nado es medio y el nivel de mantenimiento es moderado. Su reproducción potencial es alta, por lo que se recomienda tener al menos 2 ejemplares. Por otro lado, su comportamiento es pacífico y pertenece a la familia taxonómica Syngnathidae.
Los caballitos de mar adquieren coloración dependiendo del sexo. Esta variedad es criada en cautividad, lo que asegura una mayor fiabilidad en su aclimatación y evita los estragos de la pesca ilegal.
Es importante destacar que el acuario debe contar con peces de sus mismas características para garantizar un entorno adecuado para el caballito de mar.
En resumen, el caballito de mar es una especie fascinante que requiere de ciertos cuidados y un entorno específico para prosperar. La cría en cautividad ofrece una alternativa responsable y sostenible para adquirir estos peces, contribuyendo a la preservación de la especie en su hábitat natural.